Todo lo que se necesita es amor

Hace pocos días, en esta época en la que recordamos la Navidad, disfruté de nuestra tradicional maratón de películas con mi nieto mayor. Es una costumbre especial que compartimos: preparamos canguil, nos acurrucamos en la cama y apostamos quién se duerme primero. Esta vez cerramos con una película navideña protagonizada por Eddie Murphy, titulada “Imagine That”, que nos dejó grandes enseñanzas sobre el amor, la conexión y la fe.

El Terrible Mal de un Mundo Polarizado

Hoy en día, nuestros teléfonos están llenos de mensajes polarizados a favor o en contra de los candidatos a la presidencia de Estados Unidos. Aunque no somos estadounidenses, nos vemos envueltos en temas como el aborto, la migración y el totalitarismo, lo que nos lleva a tomar partido por uno de los candidatos. En redes sociales, las personas adoptan posturas tan extremas que no logran ver nada positivo en quienes apoyan al otro candidato, condenándolos sin miramientos.

Universal Leadership: The Antidote to Polarized Extremism

Repression breeds extremes. This is how the 4B movement arose in South Korea, a radical response within a society marked by a lack of equal opportunities and exacerbated abuse. In such contexts, extreme positions often appear to be the only escape. But is responding with more extremism the solution? This only reinforces the misguided idea that there are only two paths: repression or radicalization.

Liderazgo Universal: El Antídoto Contra el Extremismo Polarizado

La represión genera extremos. Así surge el movimiento 4B en Corea del Sur, una reacción radical en una sociedad marcada por la falta de oportunidades equitativas y el abuso exacerbado. En contextos como este, las posturas extremas se presentan como la única salida. Sin embargo, ¿responder con más extremismo es la solución? Esto solo refuerza la idea equivocada de que existen dos caminos: la represión o la radicalización.

Mi historia en América Economía

Durante 16 años trabajé en el negocio familiar. Mi madre, la líder de la empresa, era mi jefa, y siempre pensé que mi hermana y yo heredaríamos ese rol. Sin embargo, la vida tenía otros planes y el destino me sorprendió. Ella no nos preparó para eso; sus planes eran diferentes y, junto a sus socios, vendió el negocio. Esa decisión, aunque necesaria, me tomó por sorpresa y me llevó a replantearme mi futuro.